Eoeoeoe,
Esta semana no ha tenido nada de lo que merezca escribir, por lo menos nada especialmente divertido. He tenido una desagradable discusión con el jefe de tecnología de la oficina por culpa de mi visita a España en Septiembre. Parece ser que solo podré pasar por allí una semana y sin trabajar desde allí. Eso quiere decir que voy a disfrutar de las anti-vacaciones. Cogerme días para estar en casa sin hacer nada sufriendo dos jet-lags en 10 días. Pero todavía no se ha cerrado nada para bien o para mal.
Así que como de trabajo mejor no escribir, voy a hacer una síntesis de lo que han sido estos 9 meses.
Creo que lo más llamativo de todo es que MariaD y yo no nos hemos matado todavía. Mantenemos la convivencia con normalidad y nos lo pasamos bien pese a compartir amigos, compañeros, trabajo, viajes y casi todos los hobbies. Por suerte ella tiene libros e Ilona para hacer cosas sin mi y yo tengo mi fútbol.
Los australianos en general son demasiado simples. Sé que es fácil decir eso y que puede ser la impresión de cualquiera en el extranjero pero creo que no. Creo que por desgracia lo que viene siendo mi generación aquí está un poco perdida en valores y cultura. No saben de donde vienen y no terminan de entender el concepto de familia. Ojo, que no tengo queja con la gente de mi entorno, todos serviciales y con ganas de agradar. Lo que escribo lo escribo por mis charlas y visiones estando aquí.
Pero el principal problema de este país es su segregación. A día de hoy no es un problema grave pero esto va a pegar un petardazo a la primera crisis que se les ponga por delante. Los asiáticos por sus tiendas, los australianos un poco por todas partes, los sudamericanos al parque y los europeos de camareros. Ahora hay trabajo y la gente se busca la vida con facilidad pero esta falta de unión no crea un país.
El caso más claro está en la oficina donde la gente no casa por cultura. En España tenemos al idiota, al subnormal de turno y al jefe, pero luego todos, juntos o separados, acabamos en una terraza con una caña o una coca cola los raros. No estamos obligados a llevarnos bien pero compartimos una base. Aquí la base no existe y los que vienen de fuera no están dispuestos a asumir su papel de inmigrantes. Ojo, que yo he asumido mi parte y no falto a sus pintas (schooners) o actividades. Acepto que mi móvil personal sea el del trabajo y acepto como puedo que Junio sea invierno.
Hablan de Australia como un país de futuro, con solo 20 millones de habitantes y una extensión brutal. No dudo de su futuro pero creo que se está equivocando mucho con esta idea de Torre de Babel. A este ritmo no les va a unir el inglés como no empiecen a controlar de verdad el idioma.
Sydney es, como ciudad, de las mejores para vivir... pero porque soy un privilegiado y vivo en la city y no tengo que pagar el alquiler. Todo es muy caro aquí pero los sueldos tambien lo son, y eso que se trabaja de forma más relajada y sin echar más horas de las justas. Ahí tenemos que mejorar mucho nosotros.
La experiencia está siendo muy buena, he conocido a mucha gente de muchas culturas. Especialmente asiáticos que es todavía un continente a descubrir para mi. El inglés ha mejorado, aunque es infinito.
Os dejo una imagen del mundo visto desde aquí:
Para esta semana pocas novedades. En 11 días tendré vista y mi hermano estará un mes por aquí.
Ciao!!
Oye! Los raros serán los de la coca-cola zero!
ResponderEliminarEsos lo que son es mariiiiicas!
ResponderEliminarBribón... que lo he escrito pensando en ti :)
Jajajaja, yo cuando lo he leído, también se lo he comentado a Jaime, como que coca cola? Qué pasa con Jorge? No te preocupes Jorge, que tú no eres raro, eres diferente pero no raro, como diría Fito :)
ResponderEliminarVeo que os acordáis de nosotros :-)
ResponderEliminarPor aquí también no acordamos (yo por lo menos ;). Hoy justo he estado viendo las fotos del viaje porque ayer me preguntaron que qué tal estuvo.
Mariade, diferente para bien, no? A ver si estrenas ese twitter algún día!
Saludos y nos vemos en las anti-vacaciones y nos tomamos una coca-cola (normal!)